Mil jornadas por Flor
Hace poco más de un año decidíamos generar un ciclo en el que todas las actividades que se realizaran en San Jorge, estarían enmarcadas en «Las mil jornadas por Flor», el motivo siempre fue claro; Nunca Más permitir que nuestras luces se apaguen.
Este Sábado se llevó a cabo en la localidad en la que residía Florencia, una jornada de trabajo solidario. El objetivo principal de la misma, fue confeccionar ropa de cama que sería destinada a distintas familias de la comunidad.
Para generar éste proyecto se tuvo en cuenta a lxs niñxs con lxs que estan en contacto lxs camaradas de San Jorge, ya sea en La Plaza del Che, en las Huertas Comunitarias o en el Tallercito de Bicis de La Fede .
«Este espacio de lucha y encuentros siempre fue el lugar que agrupó a muchxs de nosotrxs en la lucha diaria por el mundo que soñamos. El mismo por el que Flor militaba con tanto fervor. «
El local Floreal «Negrito» Avellaneda, de la localidad de San Jorge es aquel espacio popular en el que se desarrollan múltiples actividades. Una de ellas es un espacio de reflexión, debate y desarrollo sobre las maneras en las que se puede hacer un análisis profundo de la realidad local y las necesidades que nos rodean a todxs como militantes. De esta forma, se genera una búsqueda constante y en conjunto de soluciones.
Una de las problemáticas que necesitaban solución inmediata, es el traslado de lxs niñes al colegio y a actividades deportivas o recreativas. Así nació la idea de crear el taller de bicicletas comunitario que funciona hace varios meses en el Barrio San Martín, en él se acondicionan bicis propias o usadas y se destinan a quienes las necesitan. En esta tarde de trabajo, también se realizaron arreglos y entregas en conjunto con les niñes que siempre se acercan al taller a colaborar y aprender.
Guerrera Comunista
De presencia destaca
con su rostro magnifico.
Asistió al hambre
abrazó el frío
e hizo caso a las voces en pausa.
Se hizo gigante, de mucho carisma
y cantó la canción del pueblo,
esa que nadie quería oír.
Un día aplacaron su voz,
apagaron sus sueños.
Todo se tiñió de sangre.
Pero como la guerra no marchita,
el pueblo floreció en las calles
alzaron su bandera
para continuar la lucha.
Y cantaron para pedir justicia,
justicia por los derechos violados.
Justicia para dar fin al patriarcado,
justicia para condenar al femicida.
Justicia por la camarada Flor.
Susana Schiozzi. san jorge, santa fe.